El espacio en que no está. Después de más de medio siglo de endulzarle la vida a generaciones de Cajamarquinos, Julio Chávez, El Manicero, dejó de vender su maní confitado en la esquina del pasaje Atahualpa.(VER VIDEO REPORTAJE)

El espacio en que no está.

Después de más de medio siglo de endulzarle la vida a generaciones de Cajamarquinos, Julio Chávez, El Manicero, dejó de vender su maní confitado en la esquina del pasaje Atahualpa.

Ya no está su puesto de maní y periódicos colgados con ganchos para ropa.

Hace algún tiempo cuando don Julio aún ocupaba su puesto se nos ocurrió hacerle una nota.

En ese entonces contó que sus hijos le prohibían vender su producto a pocos metros de la plaza. "Ya no lo necesitas, nosotros te apoyamos económicamente".

Pero se aburría en su casa y salir a vender su maní confitado era una manera de distraerse, de sentirse útil.

Ahora, con los años encima, se vio obligado a refugiarse en su vivienda, después de tantas décadas de alegrarle la vida a los cajamarquinos.

FUENTE: EDUIN LOZANO - CAJAMARCA REPORTEROS